Este edificio antiguo en Ferrol Vello necesitaba un poco de todo.
Una rehabilitación energética con aislamiento térmico por el exterior (SATE) para mejorar el confort de sus vecinos.
Ampliar el espacio de la vivienda de la última planta usando el desván, para hacer un duplex y casi duplicar el tamaño de la vivienda.
Un cambio de tejado, porque el antiguo estaba deteriorado, tenia goteras, y no tenia aislamiento térmico ni acústico, lo que hacía que el desván no fuera habitable, era húmedo, muy frio en invierno y un auténtico invernadero en verano, además de un tambor cuando llovía.
Una mejora de la escalera común, de madera pero muy incómoda y empinada, con pocos peldaños y muy altos, aumentando el numero de peldaños y reduciendo su altura para que fuera más cómodo subir y bajar (ya que no hay sitio para ascensor).
Una mejora de las ventanas exteriores, colocando ventanas con climalit, más aislantes.
Por supuesto, ponerle calefacción, que no tenía (más alla de un par de radiadores eléctricos antiguos). En este caso, se optó por una bomba de calor de aerotermia, que es tan eficiente que casi reduce el consumo a una cuarta parte de lo que gastaría esa calefacción sin bomba de calor. Con la aerotermia se obtiene también el agua caliente sanitaria. Y se encontró una forma de poner la unidad exterior de la aerotermia que fue aceptada por Patrimonio.
En la planta superior se buscó la luminosidad y las vistas al mar, para disfrutar de todo ello se colocaron balcones con puertas que además de permitir asomarse aumentaron mucho la luz natural en el interior de la ampliación, pasando de desván bajito, oscuro, antiguo, con ventanas solo a patio, a vivienda moderna, de techos altos, muy luminosa y con vistas.
En el suelo nuevo se usó un forjado de madera contralaminada (tambien llamado CLT) para no sobrecargar los muros de piedra del edificio, con lo que disminuyeron tambien mucho los plazos de la obra, al no tener que usar hormigón que necesita tiempos de secado, apuntalar, desapuntalar, encofrar. El forjado de CLT vino cortado a medida de fábrica y una grúa lo depositó sobre la subestructura metálica en solo un día. Ese mismo día ya se pudo pisar sobre él y seguir con la obra.
En el nuevo tejado se usaron vigas de madera, que ademas de ser mas ligeras que hormigón o metal, le dan un aspecto cálido a la vivienda y se dejaron a la vista para que cumplan tambien una función decorativa. Esas vigas aguantan del resto del tejado, que tiene varias capas de las que destaca el aislante térmico, con 14 cm de espesor que garantiza que no se va a volver a pasar frio ni calor en ese espacio debajo de la cubierta.
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